lunes, 5 de noviembre de 2007

El local de Bellas Artes a punto de desplomarse.


El arte está sobre ruinas. Y no hablamos del Partenón griego o de algún otro monumento del mundo antiguo, sino de la primera casa de estudios de arte del Perú, la Escuela Nacional Superior Autónoma de Bellas Artes del Perú-ENSABAP, abandonada a su suerte por múltiples gobiernos, a los que la mejor idea que se les ocurrió fue dictar sucesivas intervenciones para que algunas argollas de aparentes consagrados se hagan cargo de sus problemas, mientras sus tres locales de quincha y adobe que funcionaban en el Centro de Lima se iban desmoronando.

El último terremoto fue la estocada mortal para la Casa Canevaro, en el jirón Ancash, uno de los locales históricos de Bellas Artes. Fue cerrado por orden del INDECI y ahora se prepara para derruirlos. ¿La solución? Hacinar más alumnos en los otros ambientes: el principal de jirón Ancash y el Centro Cultural de jirón Huallaga, los que también se encuentran observados por Defensa Civil en grados de alto y moderado riesgo de desplome, especialmente el local central. Ahora hay que hacer entrar a 120 alumnos en un taller para 40 personas, por falta de espacio, como ocurre en el Taller del 1º año En el taller de Pintura han metido a los de Dibujo, con lo que se duplica el número y se confunden las especialidades.

A las autoridades del ministerio de Educación y del Instituto Nacional de Cultura, no, definitivamente. Ellos han cortado el apoyo económico a la Escuela porque argumentan que la Comisión Interventora presidida por el pintor Leslie Lee Crosby y que viene desde los primeros meses del gobierno de Toledo, y nombrada por recomendación del escultor Víctor Delfín, no les merece confianza. Pero nada hacen para dejarla sin efecto y propiciar una forma de gobierno más democrática.

Por supuesto, los interventores que dejaron languidecer año a año la Escuela, cobrando eso sí, puntualmente sus emolumentos (el director 17 mil soles, los miembros de la junta interventora más de 10 mil), no se van a conmover porque un local se cierre y los otros se caigan. Ellos siguen en su cargo. Con menos notoriedad de Manuel Burga, pero con similar desparpajo.

Más de 200 años de historia
La ENSABAP se fundó en 1918 en el local donde funciona actualmente su sede central. Ese era, entonces, un edificio centenario que antes sirvió como convento. En años no se han hecho inversiones de recuperación y ni siquiera existe un plan de contingencia ni siquiera con señalizaciones para evacuar y enfrentar sismos.

El 15 de agosto, los estudiantes creyeron que los viejos techos y paredes caerían sobre ellos. Pero los interventores ni siquiera se dignaron suspender las clases por el terremoto porque no quieren afectar el cobro de las pensiones que se aplican al nivel de ingresantes (la pre) y a los estudiantes libres.

Cansados, los alumnos agrupados en el Centro de Estudiantes de la ENSABAP realizaron el 31 de agosto una asamblea general donde se conformó una comisión de profesores, estudiantes y administrativos con el fin de elaborar un informe sobre el estado de la Escuela, que incluía un dictamen de INDECI (Defensa Civil) a la que abonaron 9 mil soles por un diagnóstico.

“En una encuesta entre el alumnado, el 85 por ciento ha respondido que el hacinamiento en que se estudia actualmente atenta contra el desempeño académico; sin embargo nada de esto parece importar al señor Leslie Lee, que tiene procesos judiciales y administrativos por irregularidades. Al parecer tiene un buen padrino” expresó Eric Quispe Alarcón, secretario de proyección social del Centro de Estudiantes y alumno de la especialidad de Grabado.

Personal administrativo se ha triplicado
“Desde que entró a la ENSABAP el señor Leslie Lee, el personal administrativo se ha incrementado en más de 3 veces sin que nadie sepa la labor que realizan. Ellos sí tienen buenos ambientes y computadoras de última generación y toda clase de comodidades, mientras los estudiantes que trabajan con solventes y tintas tóxicas y con polvos de la piedra y madera para la práctica de escultura no cuentan ni siquiera con extractores”, precisó Quispe.

En la Escuela de Bellas Artes se encuentran valiosas obras como réplicas de la Pietá y el Moisés de Miguel Angel y otras del periodo helenístico, únicas en el Perú. Entre las irregularidades del director está el haber autorizado a un ciudadano español a sacar moldes de las famosas esculturas, contraviniendo las leyes peruanas. Lamentablemente el “restaurador” utilizó un yeso común malogrando el barniz original del Moisés, que era su protección, malogrando la escultura.

Pese a tanto desatino, el señor Leslie Lee continúa al frente de la ENSABAP, por lo que los estudiantes iniciarán en los próximos días medidas en defensa de su integridad y del prestigio de la escuela que vio pasar por sus aulas a los principales artistas de la plástica peruana.

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